El liberalismo de Karl Popper
Resumen
La concepción interpersonal de la razón lleva a Popper a una especial valoración de la tradición y, en este sentido, se da una justificación indirecta de las instituciones sociales y de los valores reconocidos. Esto permite, tal vez, distinguir entre su concepción de ingeniería social y otras nociones de la misma, que van asociadas a la idea de manipulación. La filosofía política popperiana presenta muchas intuiciones que responden al sentido común. En este sentido, no es casual su afinidad con el mundo británico y el hecho de que haya vivido en Inglaterra buena parte de su vida. Su justificación de la democracia, por ejemplo, se revela especialmente valiosa si se tiene en cuenta que fue expuesta en una época en que muchos la rechazaban en nombre de diversos sistemas utópicos y otros llevaban a mitificarla. Es probable que quepa advertir importantes deficiencias en torno a las cuestiones de fundamentación última. Con todo, debe tenerse en cuenta que estamos en el campo de la política y que aquí lo importante no es tanto lo que se dice como lo que se hace. La filosofía política de Popper se halla en la base de gran parte de las democracias europeas actuales, en la renuncia a las utopías y en el vuelco de la política hacia el pragmatismo, con todos sus méritos y pequeñeces.