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El Foro para la promoción de la paz global y la sostenibilidad finalizó con la firma de la Carta de Florianópolis: Mensaje para la Paz, documento que consolida los compromisos y acciones futuras definidas durante los encuentros para la promoción de la paz y el entendimiento global, que ya se encuentra disponible en el sitio web de FOUP
Florianópolis se convirtió en el escenario del primer encuentro presencial del Foro de Universidades para la Paz, que reunió a expertos, académicos y líderes internacionales en una reflexión sobre los desafíos y caminos para la construcción de la paz. En el acto de inauguración estuvieron presentes el Rector del Instituto Federal de Santa Catarina, Prof. Mauricio Gariba Junior; el Rector de la Universidad Federal de Santa Catarina, Prof. Irineu Manoel de Souza; el Rector de la Universidad Estatal de Santa Catarina, Prof. José Fragalli; y el presidente de la Asociación Brasileña de Instituciones Educativas Evangélicas (ABIEE), Marcos Ziemer. Durante la inauguración, la rectora de la Universidad Estatal de Rio Grande do Norte y presidenta de la Asociación Brasileña de Rectores de Universidades Estatales y Municipales (Abruem), Cicília Raquel Maia Leite, destacó que el Foro es fundamental para la consolidación de la educación como base para la construcción de una sociedad más justa y pacífica.
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El panel inaugural “Universidades para la Paz: de la reflexión a la acción” contó con dos reconocidos expertos internacionales. El Dr. Francisco Gorjón, referente mundial en mediación, compartió su vasta experiencia como autor de más de 50 trabajos sobre resolución de conflictos, entre ellos el premiado “El poder de la mediación”. La Dra. Susan Andrews, psicóloga y antropóloga formada en Harvard, presentó enfoques innovadores que integran la sabiduría ancestral y la neurociencia moderna, defendiendo prácticas que promueven la salud mental y la empatía en diferentes contextos sociales. “La base de una cultura de paz comienza con uno mismo. Muchas causas de la violencia hoy están en nuestra mente. Necesitamos crear mentes pacíficas si queremos crear una cultura pacífica. Necesitamos superar sentimientos como la ira, los celos, etc. Por eso necesitamos personas mentalmente sanas”, comentó Andrews.
Con la presencia de instituciones de educación superior de Brasil y otros Estados de la región, organismos gubernamentales y organizaciones de la sociedad civil, la FOUP tiene como objetivo fomentar la producción de conocimiento y fomentar debates sistémicos sobre las múltiples dimensiones de la paz. Durante el evento de tres días, los participantes fueron invitados a pensar colectivamente, proponer soluciones e identificar oportunidades de transformación social, a partir de experiencias previas y el respeto a la diversidad cultural e identitaria.
En el FOUP, la presidenta de la Asociación Catarinense de Fundaciones Educativas (Acafé), Luciane Bisognin Ceretta, afirmó que las universidades son un territorio de alta producción, posibilidad y capacidad para discutir temas como ese. “La cultura de paz no debería ser un tema complejo, pero lo es. Por ejemplo, es necesario debatir mucho la práctica de la tolerancia en nuestras instituciones. La intolerancia es quizás el vector que conduce a tanto desorden y tanta incapacidad de diálogo en todos los segmentos sociales, en todos los países del mundo. Nos ha impedido una cultura de paz más significativa y el territorio de nuestras universidades es el lugar para trabajar en estos temas. Disponemos de infinidad de acciones y proyectos eficaces que podemos desarrollar. Si nos juntamos y compartimos veremos que estamos pasando muchas cosas buenas”, destacó.
Durante la segunda jornada del Foro de Universidades para la Paz, la profesora Georgina Alejandra Guardatti, en representación de la Universidad de Mendoza, moderó el Segundo Panel sobre “El papel de las universidades en la construcción de una cultura de paz”. Agradeció la invitación a participar en este importante encuentro en nombre del Rector Eduardo Luna y destacó que “las universidades tienen un rol crucial en la construcción de una cultura de paz que va más allá de la reflexión crítica, de la formación académica, la investigación o las actividades de extensión y vinculación que abarcan las sensibilización y acción social. Las universidades pueden contribuir a la transformación de la sociedad promoviendo valores, el respeto por los derechos humanos, el diálogo y la empatía. Frente a los desafíos actuales, la mejor respuesta que se puede dar es la promoción concreta del binomio inseparable de la educación y la cultura de paz, como consecuencia de ello, el reconocimiento y la realización del Derecho Humano a la Paz, como acertadamente manifestó el ex director de UNESCO Dr. Federico Mayor Zaragoza. Así las universidades asumen un papel preponderante, son un faro de luz para la humanidad, permiten construir una cultura de paz, educar para la paz y promover la paz como derecho humano, toda vez que sin paz no es posible la realización de otros derechos humanos”.
Este panel contó con la presentación de los compromisos asumidos por las instituciones firmantes con relación a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Durante el encuentro se detallaron las líneas de acción que guían las iniciativas encaminadas a promover la paz y el desarrollo en varias áreas críticas. Cada eje es coordinado por expertos, quienes lideran grupos de discusión integrados por representantes de las instituciones participantes. Estos grupos se reúnen virtualmente para desarrollar artículos académicos, libros o libros electrónicos, con el objetivo de compartir conocimientos y proponer soluciones prácticas.
En este sentido la Prof. Guardatti obsequió a las autoridades presentes ejemplares impresos de la obra “Los elementos constitutivos del Derecho Humano a la Paz” realizada por la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la Universidad de Mendoza, con la colaboración de la Red Federal de Estudios sobre el Derecho Humano a la Paz (Argentina), y el patrocinio de la Asociación Española para el Derecho Internacional de los Derechos Humanos (España).
En el último día del evento, el panel “Paz y Sostenibilidad” cerró los debates, trayendo reflexiones sobre cómo la justicia social, el cuidado del medio ambiente y la cooperación internacional son fundamentales para construir una cultura de paz.
Según el coordinador del evento, profesor Adriano Rodrigues, “la paz es un trabajo continuo que requiere acciones concretas y compromiso colectivo. Este Foro marca el inicio de una red que seguirá trabajando mensualmente en torno a los ejes de los ODS, promoviendo la educación y el diálogo como pilares para la transformación social”.
La Carta de Florianópolis destaca que la paz va más allá de la ausencia de conflictos, involucrando justicia, libertad, igualdad y fraternidad. Entre los compromisos asumidos se encuentran la educación para la paz, campañas de concientización, investigación e innovación, participación comunitaria y asociaciones globales. Un extracto del documento destaca que: «La paz nace cuando nos damos cuenta de que es necesario interpretarla a la luz del cuidado y del esfuerzo continuo de las personas y de los países por actualizarla, siempre en busca de un mundo en fraternidad».
Durante el primer Foro se destacó también el lanzamiento del Centro de Estudios Avanzados para la Paz en América Latina, una iniciativa que busca consolidar a la región como un referente en estudios y prácticas para la paz.