José de San Martín nació el 25 de febrero de 1778 en Yapeyú, Corrientes. Fue el menor de los cinco hijos que tuvieron Juan de San Martín y Gregoria Matorras y pasó a la inmortalidad, el 17 de agosto de 1850, en Boulogne-Sur-Mer, Francia, lejos de su Patria, pero rodeado de sus seres queridos.
En nuestro país se le reconoce como el Padre de la Patria. En Perú, se lo recuerda como su Libertador, con los títulos de Fundador de la Libertad del Perú, Fundador de la República y Generalísimo de las Armas. En Chile su ejército lo ha destacado con el grado de Capitán General.
Pero más allá de su gesta libertadora, San Martín es una persona fundamental en la construcción de nuestra identidad nacional y del espíritu de libertad de nuestro pueblo.
A partir de su célebre figura y heroico proceder, se construye esa gran narración que nos explica como país. Por eso, rememorar su vida a partir de un nuevo aniversario de su muerte es vivenciar la historia, es recordar los relatos que escuchamos en los actos escolares de nuestra infancia; esa historia que nos conformó como comunidad y que debemos pensar y reconsiderar en nuestro camino hacia una patria justa, libre y soberana.
“Desearía que mi corazón fuese depositado en Buenos Aires”, fue la voluntad póstuma del General San Martín. Sus restos fueron repatriados en 1880 y descansan en la Capilla Nuestra Señora de la Paz, ubicada en la Catedral Metropolitana.
Agosto, el mes Sanmartiniano
– El Gral. José de San Martín es nombrado Gobernador en Cuyo el 10 de agosto 1814.
– El 1 de agosto de 1816 obtiene su reconocimiento como General en Jefe del Ejército de los Andes.
–Se lo designa Capitán Gral. Ejército Chile el 20 de agosto 1820.
– Zarpa de Valparaíso al Perú, donde el 3 de agosto de 1821 es declarado Protector Supremo. Toma diversas medidas de garantía para españoles e indios. Crea la «Legión Peruana de la Guardia «, la Biblioteca de Lima y dona sus libros.
– El 24 de agosto de 1822 resuelve abandonar la vida pública, convocar al Congreso peruano y alejarse del País.
– En cuanto a su vida familiar, el 24 de agosto de 1816 nace su hija Mercedes en Mendoza «La Infanta mendocina». Y el 3 de agosto de 1823 fallece en Buenos Aires, a los 25 años de edad, Remedios Escalada de San Martín su «esposa y amiga» como escribiera en su lápida del cementerio de la Recoleta.